Durante el estado de alarma en nuestro país, e incluso hasta el mes de julio, los depósitos bancarios se utilizaron de forma masiva por los ciudadanos españoles, ya que suponían un valor refugio ante la inseguridad provocada por la crisis económica en el mercado financiero. No obstante, cuando se recuperó cierta estabilidad en el mismo, los usuarios dejaron de utilizarlos.
Así lo reflejan los datos facilitados por el Banco de España, que muestran cómo desde el inicio del estado de alarma, que recordamos fue a mediados del mes de marzo, hasta el mes de julio, se llegaron a conseguir 892.811 millones de euros solamente en depósitos bancarios, batiendo cifras históricas. Pasado el mes de julio, estos productos bancarios han dejado de utilizarse tanto, y la cifra ha descendido ligeramente, hasta los 892.245 millones.
Por qué se contrataron tanto los depósitos en el confinamiento
La principal razón que los expertos otorgan al decreciente uso de los depósitos durante los meses de verano, es que el propio cambio de estación, así como la ligera mejora que aportó la nueva normalidad, provocaron que los capitales confiados superasen a los depósitos, ya que los usuarios comenzaron a buscar liquidez, también en sus propios ahorros. En conjunto, las retiradas de dinero de los depósitos bancarios han supuesto un daño del 0,06% para la economía española durante el pasado mes de agosto.
A pesar de la pérdida, si comparamos los datos obtenidos durante este mes de agosto con los de agosto del pasado año 2019, veremos como se aprecia un importante aumento de un año a otro, incluso en un momento tan complicado como en el que nos encontramos, ya que se han conseguido ganar 57.640 millones de euros más, lo que viene a suponer un aumento de casi el 7% en relación a los datos del año anterior.
Como mencionamos anteriormente, se trataron de cinco meses consecutivos en los que se superaron de lejos las cifras históricas hasta el momento, consiguiendo recaudar un total de 40.872 millones de euros. Parecía que algo bueno se había obtenido de la crisis del coronavirus, al menos durante esos meses, ya que en el momento en que las bolsas se recuperaron, los usuarios comenzaron a retirar su dinero.
Aunque la importante retirada de dinero supone un agravio tanto para la economía española como para el desarrollo de los depósitos bancarios en sí, no podemos olvidar que se ha logrado que los usuarios españoles ingresen cerca de 40.000 millones de euros en estos productos financieros. Y eso incluso teniendo en cuenta que son productos que apenas aportan algo de rentabilidad al dinero depositado en ellos.
Y es que, en un momento de incertidumbre financiera como este, los usuarios apuestan por proteger su capital a toda costa, aunque muchos de ellos se están viendo en la necesidad de retirar parte del dinero a consecuencia de la pérdida de ingresos y la tardanza de algunas ayudas económicas ofrecidas por el Gobierno.
Según los datos publicados por el Banco de España, actualmente los usuarios, así como empresas o incluso ciertas instituciones, tienen en este producto un total de 1,55 billones de euros.
